lunedì 11 luglio 2011
Tagliatelle con salmón, rúcula y tomates cherry
sabato 12 febbraio 2011
Pasta a la carbonara
domenica 21 novembre 2010
Ñoquis de calabaza con salsa de longaniza
lunedì 1 novembre 2010
Risotto exprés
Mi madre, como todas las madres trabajadoras, tenía que hacer malabarismos a la hora de la comida; esto te suele pasar si entras en casa en el mismo momento de tu dos hijos hambrientos que te piden a gritos: “Mamáaaa!! Qué comemos??”
Bueno, la solución exprés de mi madre no era la pasta (que tarda muy poco), no.
Tampoco un sándwich (era siempre una mamá italiana, vaya).
Era el risotto!
Claro, esto no hubiera sido posible sin su fiel aliado en las batallas de la cocina: una olla express (en concreto una Lagostina).
Entraba en la cocina, sacaba las verduras (solía hacerlo con pimientos) de la nevera. En dos segundos todo estaba recortado. Sacaba la olla del mueble, el arroz, el agua y piff! en otros dos segundos la misteriosa olla estaba haciendo su trabajo.
Luego desaparecía en su habitación (mi madre, no la olla) para respirar, quitarse el cansancio de una mañana de estudiantes animados; a mi hermano y a mí nos tocaba poner la mesa y bajar el fuego en el momento del silbado.
Volvía a entrar en la cocina, apagaba el fuego, apagaba la campana (“por favor quitadme todos los ruidos”), y tiempo 15 minutos desde su ingreso en casa, los tres estábamos comiendo nuestro risotto.
Luego la hija creció, y le tocó el papel de responsable de la comida en casa. A mí también me encantaba hacer risotto, pero en la manera tradicional. La olla exprés era algo que respetaba, pero no quería tener relación con ella.
…y esta mala relación seguí durando: desde que me fui de la casa de mis padres no se me ocurrió nunca comprarla.
Parece que el rumbo ahora haya cambiado. Será que después de años luchando contra el tiempo a la vuelta del trabajo he decidido que no tenía sentido no rendirse a algo que liberó ya bastante mujeres de las generaciones pasadas.
Ha entrado en casa una WMF. Es tanto tecnológica que da miedo. No silba, lanza señales acústicos con un timer. Bip, bip, bip. Cada vez pienso que vaya a despegar.
Se me ha dado por experimentar TODO allí adentro.
Esto no quita que si me sale el antojo de risotto tradicional vuelva al antigua cacerola de barro.
Solo una nota sobre el risotto en la olla exprés: está riquísimo, solo es un poquito diferente; los granos son mas compactos, separados, porqué sueltan menos almidón.
Risotto ai funghi porcini
Qué:
1 taza (200 g) de arroz para risotto
2 tazas de agua caliente
½ taza de vino blanco
2 setas medianas boletus
½ cebolla
1 diente de ajo
Aceite EVO
Cubito de avecrem
Mantequilla
Parmesano
Perjil picado
Como:
Limpiar las setas y cortarlas en lonchitas.
Cortar la cebolla y el ajo muy finos y sofreírlos con un poco de aceite en la olla.
Añadir el arroz y esperar unos instantes a que se tueste, o sea que esté bien dorado, y luego añadir el vino de golpe. Añadir las setas cortadas. Echar el agua (en que habéis más o menos disuelto el cubo de avecrem) en la siguiente proporción: dos medidas por una de arroz.
Cerrar la olla con la tapa, y con el fuego a la máxima potencia esperar a que silbe, luego bajar al mínimo y cocer por 6 minutos (esto claro, según la olla).
Apagar y poner la olla bajo un chorro de agua fría; después abrir la válvula para sacar el vapor y abrirla. Este procedimiento es para que se quede más jugoso el arroz.
Añadir una cucharada de mantequilla, un poco de parmesano rallado y el perejil picado, remover y dejar reposar dos minutos antes de comer.
martedì 29 giugno 2010
Tarta de polenta y cerezas para la fiesta del cavolo
Yo: naaaaa…es una broma
Medico: tranquila, tampoco es tan grave, existen pasta de arroz, galletas de maíz…
Yo: naaaa..
Medico: pues si hija, nada de trigo por 6 días a la semana, tienes intolerancia!
Yo:arrrrrrrrrrrrrraaaaaaaaaaaaarrrrrrraaaaaaaaaaaaaaaarrrrrrrrrrrggggggggggggg
Total: ya son dos meses que por la semana no tomo trigo. Yo que he vivido a pan, pasta, pizza, focaccia, tartas, galletas, harina y harina y otra vez harina (será por esta razón que ahora no paro de adelgazar???).
El resultado es que me ha cogido una depresión culinaria. No tengo ganas de cocinar. La cocina italiana no es solo esto, LO SE!, y lo digo siempre, pero ahora sueño solo con las cosas prohibidas, y no me apetece cocinar nada que no tenga xxxx!!!Lo siento por todos aquellos que sufren de celiaquía, la verdad es que solo ahora me doy cuenta de lo que significa, TODO lleva harina de trigo como espesante, es increíble. Y aunque yo no estoy tan segura que la doctora tenga razón ( aparte adelgazar sigo con los mismos síntomas) seguro que este momento me está sirviendo para reflexionar sobre el hecho que quizás muchas intolerancias se deben al hecho que nuestras costumbres alimentarias nos llevan a sobredosis de trigo.
Pero ahora ya tengo ganas de volver a utilisar el horno : he sacado del armario las harinas permitidas y las forbidden.Justo hoy ahora acaba el concurso del cavoletto, y al final, he decidido que cual ocasion mejor para volver a cocinar probando nuevas recetas que no lleven trigo (aunque todavía me queda mi trigo day, todos los domingos).
Sigrid el año pasado publicó un libro de recetas, del cual hasta ahora he escuchado maravillas, y festeja este mes el aniversario con la “Festa del Cavolo”.
He dicho escuchado, porqué hasta la fecha no he tenido la ocasión de comprarlo (estoy enviando mensajes subliminales para que alguien me lo regale).
Para la ocasión hay que cocinar una receta del libro segun como te apetezca. He elegido la receta de una tarta, con harina de maíz y de trigo, y claramente he substituido el trigo con fécula de maíz (ademas de cambiar las frambuesas previstas en la receta con unas cerezas). El resultado? La tarta es divina, es mucho más baja del original (…ya que no lleva gluten..) pero el sabor….mmm, riquísimo!! Para la receta original de referencia, no teniendo el libro todavía ,he mirado los comentarios de los otros concursantes. Así que a nivel de concurso me podría considerar un “hors competition” ;-)
p.d. 1 la harina de maíz que he utilizado es la que compré en Val Camonica, en Italia, en un antiguo molino donde todavía trabajan con la piedra y la sola fuerza del agua
p.d. 2 la tarta se parece más pequeña en la foto..porqué lo es! la hize con mitad de las cantidades ya que no tenía bastante mantequilla en mi casa. para la coccion exacta comprobad con el metodo del palillo: si pinchando la tarta queda mojado, le falta aun, si queda seco está lista.
Torta di polenta e ciliege
qué :
400 g cerezas
175 harina de maíz
60 g maizena
225 g mantequilla
225 azucar
4 huevos
1 cucharita de aroma de vainilla
1 cucharita de baking powder
como:
1
2
3
4
5
6
7
8
domenica 28 marzo 2010
Verdemusgo: la valle del jerte con 1% de cerezos en flor
Esto es lo que pasó ayer cuando llegamos con una montón de ilusión en la valle del Jerte, esperando de ver la manta blanca de flores de cerezos..
Invierno demasiado frio: solo unos arbolitos con más coraje empiezan a sacar las flores, los demás todavía no se atreven. Eso sí, si teníais previsto de ir por semana santa, quizás el sábado que viene el espectáculo estará montado.
Pero os tengo que confesar una cosa: el blanco de los cerezos es encantador, pero yo tengo manía para el verde, y la impresionante cantidad de musgo que había me ha puesto de buen humor!!
La verdad es que es un paisaje estupendo, donde la mano del hombre ha intervenido en sintonía con la naturaleza: el importante es salir de la carretera y adentrarse en el bosque, una bonita excursión de unas tres/ 4 horas todas subiendo. Os aseguro que merece la pena (el culo también agradece).
domenica 21 marzo 2010
Pastel de judías verdes y patatas a la genovesa
Alguien me comentó hace poco que las recetas que pongo son super difíciles para quien no está acostumbrado a cocinar.
Bueno, la verdad es que mas que difíciles, en muchos casos necesitan tiempo..pero creo que lo que se pueda invertir cocinando solos, en pareja, familia, amigos, es tiempo muy bien invertido.
Ya que se si supera la pereza inicial es una manera muy fácil de compartir y de dar un poco mas de creatividad y concreción a nuestra vida alienada de urbanitas!!
Con esto, dedico este post a quien hace mas de 3 años abrió la puerta de su casa en Madrid para acoger a una perfecta desconocida que no hablaba una palabra de castellano, y le dio un techo bajo donde dormir.
p.d. este pastel, que en italiano se llama polpettone y en genovés porpetton, a parte de hacerme recordar de las toneladas de judías verdes que he limpiado de pequeña mientras que mi abuela estaba cocinando, es un plato sencillo y versátil: se puede comer caliente, recién echo, o frío junto a una ensalada de tomates, perfecto para ponerlo en un tupper y llevarlo al trabajo. También se puede substituir las judías por unas berenjenas o unos calabacines.
Porpetton de faxolin
qué
500 g patatas
500 g judías verdes
3 huevos
1 cebolla
½ diente de ajo
aceite extra virgen de oliva
2 cucharitas de mejorana
nuez moscada
1 cuchara de perejil picado
pan rallado
opcional: setas secas
para quien: 6 personas
como
Limpiar las judías verdes cortando las dos extremidades (justo un poquito, 1 cm o menos).
Enjaguarlas y cocerlas por 20 minutos en una olla llena de agua hirviendo.
Hervir también las patatas enteras con su piel en otra olla hasta que se queden blandas. La diferencia es que las patatas hay que ponerla en el agua fría mientras que las judías en el agua hirviendo.
Pequeño truco para que las judías no pierdan su verde brillante: después que estén listas, escurrirlas y pasarlas bajo el agua fría hasta que se enfríen.
Pasar las verduras con un pasa-puré con huecos grandes o cortarlas muy finas con un cuchillo. No os consejo la batidora, ya que si no se queda una crema sin consistencia.
Calentar el aceite en una sarten y sofreír la cebolla con el ajo y el perejil, todos picados. Añadir las patatas y las judías, la mejorana y un poco de nuez moscada rallada.
En el caso tengáis unas setas secas añadid un puñado que habréis dejado ablandar anteriormente en un poco de agua templada.
Dejar unos minutos, justo para que cojan mas sabores las verduras, apagar el fuego y dejar enfriar.
Añadir los huevos y mesclar todo con un tenedor.
Untar un molde rectangular para horno con los bordes no muy altos, espolvorear con el pan rallado.
Verter las verduras por encima, dar unos golpes al molde para que se quede plano el contenido. Pasar un chorrito de aceite y espolvorear con otro pan rallado. Pasar un tenedor por encima presionando como si quisierais aplastar la masa.
Poner en el horno a 180 grados por 30/40 minutos.